El Gobierno bonaerense anunció la apertura de una sede del Plan Fines, de terminación de los estudios secundarios, en el excentro clandestino de detención Pozo de Banfield, donde estuvieron cautivos los 10 estudiantes secundarios secuestrados en el episodio conocido como «La Noche de los Lápices».
Así lo anunció el subsecretario de Derechos Humanos bonaerense, Matías Moreno, en un acto realizado en ese lugar Espacio de Memoria, junto a la Secretaría de Derechos Humanos de la Nación y el Municipio de Lomas de Zamora por el 45° aniversario de ese hecho.
En la actividad, de la que participaron representantes de organismos de derechos humanos, sobrevivientes y familiares de las víctimas, se anunciaron la puesta en funcionamiento de una sede del Plan Fines, el inicio de cursos taller de capacitación laboral del Ministerio de Trabajo de la Provincia, la apertura de una sede del Centro de Acceso a la Justicia (CAJ) y el avance en las tareas de preservación del lugar y en el pedido judicial para ampliar la construcción de aulas taller.
La actividad comenzó con una recorrida por la ex maternidad clandestina y el sector de calabozos de lo que fue el ex CCDyT. Participaron de la recorrida Moreno, el ministro de Justicia y Derechos Humanos de la provincia, Julio Alak, y el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla Corti.
También estuvieron la Mesa de Trabajo Ex Pozo de Banfield, representada por Noemi «Mimi» Di Gianni, junto a Delia Giovanolla, fundadora de Abuelas de Plaza de Mayo y su nieto restituido, Diego Martín Ogando; el sobreviviente de La Noche de los Lápices Pablo Díaz, junto a Marta Ungaro y Emilio López Muntaner, hermanos de los desaparecidos Horacio Ungaro y Francisco López Muntaner.
Moreno anunció la apertura de una sede del Plan Fines destinada a jóvenes, adultos y adultos mayores en una comisión especial con orientación en derechos humanos y las demás acciones.
Pietragalla Corti remarcó la importancia de recordar a los jóvenes de La Noche de los Lápices y señaló que «tenemos el desafío de luchar con los sectores de la sociedad que banalizan lo qué se vivió en este lugar, lo que vivió cada uno de los compañeros en este lugar».
Sostuvo que «el odio es irracional y el negacionismo abunda. Nadie puede permitir que alguien reivindique la violación a compañeras, la tortura, el robo de bebes, el asesinato, arrojar personas vivas de aviones, fosas comunes».