El delantero Silvio Romero presiona a la dirigencia para irse al exterior frente a las diferentes ofertas, pero los números no convencen a Independiente, al tiempo que se define la renovación del arquero uruguayo Sebastián Sosa.
El atacante, que llevó la cinta de capitán en los últimos dos años, tiene la posibilidad de emigrar al fútbol brasileño porque Ceará le acercó un contrato alto y en dólares para afrontar el próximo Brasileirao y la Copa Sudamericana. También tiene un ofrecimiento del fútbol paraguayo, de un club cuyo nombre no trascendió, y otro de México, donde vistió la camiseta del América.
El futbolista, según pudo averiguar Télam, quiere emigrar y ya se lo hizo saber a los directivos y a su representante. La idea es que Independiente reciba un resarcimiento de alrededor de 500 mil dólares, cuando tiene una inhibición de poco más de un millón.
El exLanús, que marcó 10 goles en el último semestre, es un hombre clave para el nuevo entrenador, Eduardo Domínguez, que en estas horas se acercó para convencerlo de la continuidad y allí se encontró con la resistencia del futbolista.
Los dirigentes pretenden recuperar la inversión hecha en 2018 cuando lo adquirieron por 4.200.000 dólares por el 70 por ciento del pase, aunque el mercado desde la pandemia cambió y los números son otros.
De esta manera, el deseo de las partes chocan y está claro que Romero no quiere continuar en Independiente, sobre todo después de resignar una parte de su salario en 2020 frente a la inactividad. Un nuevo retraso salarial el año pasado, a lo que se sumaron los insultos de los hinchas sobre el cierre del campeonato, hacen pensar al cordobés en la posibilidad de emigrar.
«Si se siente contento y está bien, nos podrá dar mucho a nosotros. Nos vamos a focalizar primero en eso para que tome la mejor decisión y es lo que queremos», argumentó Domínguez en la conferencia de prensa de la semana pasada cuando asumió el cargo.
Por otro lado, el uruguayo Sosa arregló su situación con Mazatlán de México y ya es futbolista libre. Por ende está en condiciones de cerrar la renovación en los próximos días, aunque por el momento hay diferencias en los números.
El entorno del arquero, recientemente convocado por el seleccionado de su país, se plantó en el monto pedido y avisó que deberá cerrarse «pronto» o buscarán nuevos destinos.
Este es otro inconveniente para Domínguez, quien quiere apoyarse en los dos jugadores más experimentados para afrontar la nueva temporada, con el objetivo de ser protagonista en la Copa de la Liga y en la Sudamericana.