El plenario de las comisiones de Presupuesto y Hacienda y Legislación del Trabajo de la Cámara de Diputados fue citado para este jueves a las 15.30 para emitir dictamen sobre el proyecto de reforma al Impuesto a las Ganancias, que el oficialismo aspira a votar en una sesión especial que se realizará la próxima semana.
Previo a la discusión de ganancias, se realizará a las 15 una reunión de la Comisión de Presupuesto para analizar las modificaciones del Monotributo, ámbito en el que se buscará aliviar la situación fiscal de aquellos que deben pasarse al sistema de autónomos, informaron fuentes del oficialismo,.
La citación al plenario fue resuelta por los titulares de las comisiones de Presupuesto, Carlos Heller (Frente de Todos); y de Legislación del Trabajo, Vanesa Siley (Frente de Todos), tras la firma del Protocolo de Funcionamiento del cuerpo legislativo.
El Protocolo establece que las sesiones y las comisiones serán presenciales, pero permite la participación remota de los diputados que forman parte de los grupos de riesgo o no pueden concurrir debido a las restricciones establecidas debido a la pandemia.
De todas maneras, las comisiones podrán funcionar en forma remota si así lo acuerdan los presidentes y vicepresidentes de cada organismo asesor.
El proyecto de reforma del impuesto a Ganancias que impulsa el oficialismo modifica el artículo 30 para aumentar la deducción especial a partir del cual se calcula el impuesto, con el fin de que no paguen ese gravamen los trabajadores que cobren hasta 150 mil pesos brutos.
Esta medida -según los cálculos del Gobierno- beneficiará a 1.280.000 personas, del total de dos millones de asalariados registrados que hoy pagan ese tributo.
El proyecto contempla también que los salarios superiores a 173 mil pesos brutos continuarán pagando los mismos valores que desde el primero de enero cuando se actualizo el Mínimo No imponible en un 35%.
El costo fiscal de la modificación de uno de los tributos que más recursos aporta a las arcas del Estado es de 41.250 millones de pesos, según señaló el secretario de Política Tributaria, Roberto Arias.
La ley que se buscará aprobar se aplicará de manera retroactiva desde enero pasado, con lo cual se devolverá el dinero descontando por este concepto a los largo del primer trimestre del año a los trabajadores beneficiados con la corrección, lo que podría volcar unos 10 mil millones de pesos al consumo interno, según estimaron en el equipo de asesores de Massa.
La iniciativa presentada inicialmente sufrirá diversas modificaciones, ya que se excluirá del calculo del gravamen el aguinaldo de los que están beneficiados con esta medida y se permitirá a los jubilados que perciben hasta ocho jubilaciones mínimas acceder al beneficio aunque tengan ingresos extras hasta 164 mil pesos anuales.
En tanto, los asalariados que perciben entre 150 mil pesos y 173 mil pesos tendrá una escala de deducciones que será definida por la AFIP para evitar saltos entre aquellos que tributan y los que quedarán eximidos.