La crisis internacional y la volatilidad de los precios internacionales de los commodities están generando un impacto «neutral» en la balanza de pagos de la Argentina, situación que requiere «ir calibrando» la cuestión fiscal, afirmó el ministro de Economía, Martín Guzmán.
Tras recorrer ayer la Exposición Argentina Oil & Gas que se desarrolla en el predio de La Rural, aseguró que «el shock en la balanza de pagos, a los precios de hoy, es neutral, pero la situación cambia todo el tiempo porque hay muchísima volatilidad en todos los frentes», en el frente de energía y los otros commodities.
En referencia a la preocupación por el costo de la volatilidad de precios en las cuentas públicas, señaló que «se compensa el impacto que tiene el shock en los commodities -tanto en granos como en el oro, en los productos de la minería en general- con el shock en la energía, dadas las necesidades de importación para la Argentina».
La Argentina es un importador importante de GNL durante los meses de invierno y el año pasado esa cuenta demandó del tesoro recursos por unos US$ 1.100 millones, se espera que la cifra se multiplique en 2022 por la escalada de los precios del gas internacional.
«El mundo está viviendo una crisis energética global: una crisis de la distribución en general con el impacto que tiene la situación geopolítica tanto en los commodities como en la energía» y para la Argentina «esto implica un shock multidimensional» afirmó.
«Necesitamos garantizar condiciones que acompañen al proceso de normalización macroeconómica, y que además garantice el abastecimiento de mercado interno, agregó tras enfatizar que se deben «buscar los desafíos inmediatos a corto plazo y potenciar las oportunidades de desarrollo de sector».
Al respecto, dijo que el Gobierno nacional quiere generar las condiciones para que la Argentina exporte Gas Natural Licuado (GNL), para lo cual trabaja en generar las condiciones macroeconómicas y de reglas de juego que permitan incrementar las inversiones y la producción.
Durante la visita, Guzmán expresó que «el gas juega un rol central para la transición energética y en particular el GNL» tema en el que señaló viene hablando «con funcionarios del alto rango de distintos países para avanzar realmente en la cuestión.
«Queremos que Argentina produzca GNL», aseveró el ministro al recordar que la Argentina firmó recientemente la iniciativa mundial de emisiones cero.
La proyección de demanda de GNL que se hace es que «va a ser mayor para el 2030 que ahora», analizó el ministro por lo que aseguró que en diálogo con un conjunto de países «hay mucho interés en GNL y Argentina debe construir las condiciones para que esto sea posible».
En ese sentido, aseguró que el Gobierno viene dando «pasos muy importantes para construir condiciones de mayor estabilidad macroeconómica en la Argentina, y de estabilidad de reglas de juego, que son claves para el sector».
Al respecto, volvió a explicar que el Gobierno trabaja en «un esquema que específico para el sector de la energía» por lo que es de esperar que «en las próximas semanas se pueda estar corrigiendo algunos de los aspectos de las regulaciones vigente».
«Al mismo tiempo -aseguró- se está trabajando en que haya mayor claridad desde el punto de vista de las reglas para la cuestión de garantizar el abastecimiento en el mercado interno al mismo tiempo que hay claridad desde el punto de vista de cuáles son las reglas para exportar».
Guzmán destacó que hay condiciones clave para acelerar el desarrollo del sector, el primero de los cuales es la «estabilidad macroeconómica y de balanza de pagos».
«Por eso cada uno de los pasos que se han venido dando como ordenar la cuestión de las deudas externas, sacar presión es clave en la balanza de pagos en la brecha cambiaria y poder ir en la dirección contraria», explicó el titular del Palacio de Hacienda.
Como segundo punto, señaló la necesidad de «elevar la capacidad de infraestructura» un tema en el que «el Estado tiene un rol muy importante» y en el que definió que «gasoducto Néstor Kirchner es la obra de infraestructura más importante que tiene la Argentina para el próximo año».
Finalmente, señaló la necesidad de «cierta claridad en las reglas del juego» a lo que aseguró se viene «trabajando en adaptar el esquema de regulaciones de capitales en particular para el sector energético»; y planteó que para cumplir los objetivos de desarrollo energético será prioritario «mayor escala de producción para poder tener un desarrollo de otra magnitud, sobre todo, Vaca Muerta, porque el resto de las cuencas puedan tener otra envergadura en términos de desarrollo.
En ese esquema, completó, «YPF juega el rol catalítico central* y por eso es tan importante para la dinámica de contar con la compañía aunque «la escala que se está necesitando es fundamental también el rol del capital internacional».