La producción de las pymes industriales creció en abril 3,4% interanual, en la medición a precios constantes, mientras que frente a marzo pasado tuvo una retracción de 0,5%, según un relevamiento realizado por la Confederación Argentina de la Mediana Empresa (CAME).
Durante el cuarto mes del corriente año, el uso de la capacidad instalada en las pequeñas y medianas empresas fue de 70,4%, 1,2 puntos porcentuales por debajo de marzo.
La mejor performance en abril la tuvo la rama industrial vinculada a la Fabricación de productos de metal, maquinarias, equipos y material de transporte, con un aumento 11,6%; mientras que en la otra punta se ubicó Maderas y muebles, con una nueva caída interanual de 7,1%.
El informe de CAME enfatizó que si bien los pedidos de producción se mantuvieron firmes durante el mes, «las empresas tuvieron mayores dificultades que lo habitual para fabricar por las demoras de entregas de materia prima».
«En abril, la industria no tuvo problemas de demanda porque el mercado se mostró muy dinámico, pero sí inconvenientes de producción por el encarecimiento y desabastecimiento de insumos», agregó la entidad pyme.
El relevamiento de CAME fue realizado entre el 7 y el 15 de mayo pasado y abarcó a 320 establecimientos con sedes en 22 provincias y CABA.
En el plano cualitativo, en cuanto a las expectativas para los próximos dos meses, el 10% de las industrias se mostró confiada en que la producción aumentará; el 5% dijo que disminuirá; y el 85% prevé que se mantenga sin cambios.
Por rubros, en abril la producción de Indumentaria y textil subió 4,3% interanual y bajó 9,3% en la comparación con marzo.
«Los pedidos de ropa de invierno se mantuvieron firmes a lo largo del mes y el sector trabajó con el 75,8% de sus instalaciones, que son niveles relativamente elevados. El rubro se encuentra en una etapa de renovación de maquinarias e incorporación de tecnología para abastecer a la oferta y particularmente en abril, se enfrentó con problemas de abastecimiento de algunos insumos, especialmente telas, hilos y tintas», sostuvo CAME.
En Alimentos y bebidas, por su parte, la actividad declinó 0,2% interanual en abril y cayó 5,5% contra marzo.
«El rubro encontró mayores problemas para trasladar las subas de costos a precios porque los pedidos no mantuvieron la firmeza de meses anteriores. Los encargos escolares escolares, el regreso de los eventos o del trabajo presencial, que son factores que vienen traccionando la demanda en rubros como fábricas de pastas, de galletitas, de productos de panadería, o bebidas, se mostraron más sensibles a los aumentos de precios en abril y los empresarios debieron absorber una parte con su rentabilidad», sostuvo la entidad pyme al describir la actividad del rubro Alimentos y bebidas.
Por último, la actividad del sector denominado Metálicos, maquinarias, equipos y material de transporte reflejó una mejora de 11,6% interanual y 12,1% mensual.