El senador del Frente de Todos (FdT) Oscar Parrilli consideró hoy que la Policía de la Ciudad «sitió» la casa de la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner durante el fin de semana con la intención de «aislarla de la gente», y advirtió que «algunos dirigentes de Juntos por el Cambio (JxC) están poniendo en riesgo la convivencia democrática».
«Lo que ocurrió el fin de semana demuestra que hay un actitud de sitio en la casa de Cristina. Fue sitiada y la intención fue aislarla de la gente. Estamos llegando a un punto en algunos de los dirigentes de JxC están poniendo en riesgo la convivencia democrática de la Argentina», dijo Parrilli en Radio 10.
El sábado último, la Policía de la Ciudad dispuso un vallado y el cierre de los accesos a la vivienda de la vicepresidenta en el barrio porteño de la Recoleta, y reprimió a los manifestantes que se encontraban en las inmediaciones del domicilio, entre ellos su hijo y diputado nacional del FdT Máximo Kirchner.
Parrilli expresó que las actitudes de la titular del Pro, Patricia Bullrich, y del expresidente Mauricio Macri en favor de la represión son una muestra de «una disputa interna del espacio» para «ver quién es más duro y antiperonista».
Bullrich había criticado que a JxC por verse «débil» a raíz de que, dijo, la ciudad de Buenos Aires «siempre está con las calles tomadas».
«Mauricio Macri, Patricia Bullrich y Horacio Rodríguez Larreta están jugando a ver quién es más duro», afirmó Parrilli, al incluir en esa disputa interna al jefe de Gobierno porteño.
El legislador señaló que «fue muy alarmante» lo ocurrido; «primero sitiarle la casa, la represión y el espionaje por parte de la Policía».
También repudió la forma en que la Policía de la Ciudad «agredió y reprimió» a Máximo Kirchner.
«En la ciudad de Buenos Aires hay una policía política. No está para garantizar la seguridad de las personas, es un instrumento al servicio del macrismo y y Larreta la viene utilizando desde que es jefe de Gobierno», añadió.
El extitular de la Agencia Federal de Inteligencia (AFI) dijo que los hechos del fin de semana «tienen una gravedad institucional» para la democracia e indicó que «van a pedir investigarlo».
«A dos cuadras de la casa de Cristina fue puesto a la mañana un camión, con piedras, con toda premeditación y alevosía, lo pusieron ahí para que la gente se enardeciera», remarcó.
Parrilli aseguró que «hubo un plan armado para generar violencia» y con eso conseguir «echarle la culpa» al peronismo.