martes, noviembre 26, 2024

DEPORTES

«SIEMPRE ME LLEVO UNA ENERGÍA MUY ESPECIAL DE ARGENTINA», ADMITIÓ EL CRACK ESPAÑOL RAFAEL NADAL

El tenista español Rafael Nadal, dueño del récord de títulos de Grand Slam con 22 trofeos y considerado el mejor de la historia sobre polvo de ladrillo con su colección de 14 coronas en Roland Garros, admitió que «siempre se lleva una energía muy especial de la Argentina», en la previa de la exhibición que animará este miércoles con el «top ten» noruego Casper Ruud.

«Me siento muy feliz de estar nuevamente en Buenos Aires después de varios años. Tengo la ilusión de compartir una gran jornada con un público tan apasionado del que tengo recuerdos inolvidables, siempre me llevo una energía muy especial de cada visita a la Argentina», subrayó Nadal.

El súper campeón nacido en Mallorca hace 35 años llegó temprano al país y ofreció una conferencia de prensa junto al noruego Ruud en el tercer piso del Alto Palermo Shopping, en el que se mostró de muy buen humor y repasó varios momentos de su carrera, especialmente los vinculados a sus visitas a la Argentina.

Nadal, exnúmero uno del mundo y actualmente segundo en el ranking mundial de la ATP, detrás de su compatriota Carlos Alcaraz, jugará este miércoles a las 18 un partido de exhibición frente al noruego Ruud, de 23 años y tercero del planeta, en el estadio Mary Terán de Weiss, en el Parque Roca, en Villa Soldati.

«Cuando vine por primera vez a la Argentina tenía apenas 18 años y no imaginaba la carrera que tendría después. No era alguien súper soñador ni tampoco súper egocéntrico como para pensar en todo los títulos que podía ganar en el futuro», confesó Nadal, quien llegó ayer por la mañana a Buenos Aires y enseguida se trasladó junto a Ruud a Puerto Iguazú para una producción fotográfica, para regresar pasado el mediodía.

La visita de Nadal se trata de la quinta al país, luego de la primera en 2005 cuando tenía 18 años y era el número 48 del mundo. En esa ocasión jugó el Argentina Open y cayó en cuartos de final ante Gastón Gaudio, luego campeón del torneo.

Ese año «Rafa» inició su notable cosecha de títulos puesto que obtuvo por primera vez el abierto de Roland Garros, algo que luego repitió otras 13 veces, la última este año y tras imponerse en la final ante Ruud por un categórico 6-3, 6-3 y 6-0.

La segunda visita de Nadal a la Argentina fue en noviembre de 2013 en ocasión de la despedida del tenis de su amigo David Nalbandian, para jugar una exhibición junto al cordobés de Unquillo, al serbio Novak Djokovic y a Juan «Pico» Mónaco en el predio de La Rural, en el barrio porteño de Palermo, y luego otra en el Orfeo de Córdoba.

Luego «Rafa» vino dos veces más, ambas en febrero y al Argentina Open, en 2015 cuando se coronó campeón tras imponerse en la final sobre el tandilense Mónaco, y luego en 2016 cuando cayó en semifinales ante el austríaco Dominic Thiem, quien alzó el trofeo de esa edición.

«Siempre construí mi carrera en el día a día, con mucha ilusión por mejorar y pasión para entrenar, dando la máxima intensidad como espero seguir haciéndolo mientras pueda para estar competitivo», recordó Nadal.

La exhibición de este miércoles en Buenos Aires tendrá además un atractivo especial ya que previo a su partido ante Ruud, al que superó las dos veces que se enfrentaron, la mencionada en Roland Garros y la semana pasada en el Masters de Turín, en la fase de grupos por 7-5 y 7-5, habrá un doble mixto del que tomará pare Gabriela Sabatini, la mejor tenista argentina de la historia, y también la tigrense Gisela Dulko.

Nadal formará pareja con Sabatini y Dulko se unirá a Ruud para animar un doble que permitirá a los fanáticos del tenis reencontrarse con «Gaby» después de 13 años, tras la exhibición que jugó en 2009 con la checa nacionalizada estadounidense Martina Navratilova.

«Poder jugar con Gabriela me genera mucha ilusión. Ella es un ícono del tenis argentino y también a nivel mundial, será algo muy especial», apuntó Nadal.

El mallorquín, ganador de 92 títulos en el circuito y también campeón de la Copa Davis con España, se refirió a su no muy lejano retiro del tenis, luego de haberse producido este año el de otra leyenda como el suizo Roger Federer, con quien integraba el denominado «Big Three» junto al serbio Novak Djokovic.

«Tengo muy claro que el reloj biológico corre, pero también que no existe nadie más importante que el propio deporte en sí mismo. Antes que yo, Roger o Djokovic estuvieron Borg, Vilas, McEnroe, Sampras, Agassi y tantos otros, y cuando ninguno de nosotros esté más en el circuito surgirán las nuevas estrellas que ya están en camino para continuar ganando títulos y haciendo historia», analizó Nadal.

El denominado «Rey del polvo de ladrillo» se casó en 2019 con su novia de toda la vida, Mery Perelló, más conocida como «Xisca», y hace 45 días tuvieron su primer hijo al que llamaron Rafael.

«Soy muy realista, estoy preparado para mi siguiente vida afuera del tenis, tengo también otras cosas que me hacen muy feliz como esto de ser padre que es algo totalmente nuevo. No puedo predecir el futuro pero mi deseo de seguir adelante está intacto y cuando deje de competir iniciará otra etapa que también me dará felicidad», concluyó Nadal.