Una mujer de 50 años fue herida a puñaladas por su exmarido, quien la esperó en una parada del colectivo en el partido bonaerense de Berazategui e incumplió una restricción de acercamiento tras una denuncia por violencia de género, tras lo cual fue detenido y esta mañana se negó a declarar ante la Justicia, informaron hoy fuentes policiales y judiciales.
El hecho, que se conoció hoy, ocurrió ayer por la mañana en el cruce del Camino General Belgrano y la calle 410, de ese partido del sur del conurbano bonaerense, y la víctima, de quien se preserva su identidad, permanecía internada en una clínica de la ciudad de Buenos Aires.
Según las fuentes, todo comenzó a raíz de un llamado al 911 que alertaba sobre una mujer herida, por lo que personal de la comisaría 1ra. de ese distrito se trasladó al lugar.
Fuentes policiales y judiciales informaron a Télam que los efectivos aprehendieron en el lugar a José Manuel Pohl (57), quien minutos antes esperó a su exesposa, de 50 años, en una parada de colectivos ya que ella diariamente bajaba en la intersección antes mencionada para ir al trabajo.
Allí, el hombre se camufló entre los pasajeros que aguardaban el colectivo y cuando la mujer descendió del transporte público, el imputado -sin darle tiempo a reaccionar- le propinó cuatro puñaladas en el abdomen, por las cuales la mujer fue trasladada de urgencia al hospital Evita Pueblo de Berazategui.
La víctima fue operada y luego fue derivada al Centro Médico Fitz Roy, en el barrio porteño de Villa Crespo, donde permanece internada y «estable», sin riesgo de vida, añadieron las fuentes.
El hombre se encontraba en el lugar del hecho cuando los policías acudieron, donde le secuestraron una cuchilla con la que el atacante atacó a su exesposa.
Pohl fue indagado hoy por la fiscal Silvia Borrone, quien le imputó el delito de «homicidio en grado de tentativa agravado por la relación de pareja preexistente y por mediar violencia de género».
El hombre, quien se negó a declarar y continuará detenido por disposición del juzgado de garantías interviniente, desde marzo tenía una denuncia en un juzgado de familia que le prohibió acercarse a la víctima, lo cual incumplió para cometer el ataque.
Además, en 2010 también hubo una denuncia penal pero que fue archivada, concluyeron las fuentes.