El partido que jugarán este sábado Unión y Tigre, que junto a otros tres puede definir ese mismo día el segundo descenso de la temporada del fútbol argentino, fue considerado de «altísimo riesgo» por el Ministerio de Seguridad de Santa Fe y tendrá un operativo policial de 550 agentes, pese a que solo concurrirá el público local.
Así lo informó el subsecretario de Seguridad Preventiva, Marcos Romero, tras la reunión celebrada en la sede de la Unidad Regional Uno de policía, para diagramar el operativo de seguridad del cotejo que se jugará este sábado a las 18 en el estadio 15 de Abril, correspondiente a la 14ta. fecha de la Copa de la Liga Profesional.
Romero dijo que «será un partido de altísimo riesgo, porque todos saben el momento que está viviendo Unión» y que se diagramó «un dispositivo bastante amplio, donde vamos a estar contando un servicio de 550 policías».
Ese encuentro se jugará en forma simultánea con Vélez Sarsfield-Colón, Banfield-Gimnasia La Plata y Platense-Sarmiento de Junín, ya que hay cinco equipos que corren el riesgo de perder la categoría.
Romero informó que la apertura del estadio se realizará a las 15 para que los aficionados «puedan ingresar en forma tranquila y que tengan el tiempo suficiente», en tanto el operativo se iniciará a las 14.
El funcionario dijo que se realizarán cortes de calles en las adyacencias del estadio del «tatengue» debido a que «Colón juega al mismo horario», por lo cual el operativo tendrá en cuenta posibles cruces de hinchas de ambos clubes, que son dos de los equipos con riesgo de descenso. El «Sabalero» jugará ante Vélez en Liniers.
En la reunión quedó descartada la posibilidad de jugar sin público, pero se acordó una serie de controles que incluirán también el estadio y el predio de Colón, así como el lugar de concentración de Unión.
«Creemos que Unión tiene sus chances de seguir permaneciendo en primera, entonces, no vimos motivos para cortarle el festejo a los hinchas si esto sucede. Lógicamente, si el resultado es adverso, hay que hacerle entender a la gente que no es más que un partido de fútbol», añadió Romero.
El funcionario evaluó que «hay otros problemas que está viviendo la sociedad, que son peores que si Unión pierde», y en ese sentido contó que se habló con la dirigencia «tatengue» porque «tiene que hacerle entender a los hinchas que es un partido de fútbol, nada más».
En la jornada del sábado se jugarán todos los partidos en los que participan equipos con posibilidades de descender de acuerdo a la tabla general de la temporada, entre los cuales el más comprometido es Unión (43 puntos), en tanto Gimnasia y Colón tienen 45; y Vélez y Sarmiento acumulan 46.
Con ese panorama, Unión está obligado a ganar para no perder la categoría y a partir de ese hipotético triunfo restará saber si se salva en forma directa (ante una derrota de Colón o Gimnasia), o si deberá jugar un desempate con el o los equipos que finalicen con 46 unidades.