El ministro de Economía, Martín Guzmán, aseguró que el Gobierno está implementando políticas para consolidar un crecimiento económico sostenido y que, pese a la pandemia y a los efectos de crisis económica que estalló en 2018, con la actual gestión «la industria está creciendo», mientras con la anterior «se achicó».
Al exponer ante empresarios del Consejo Interamericano de Comercio y Producción (CICyP), Guzmán aseguró que el Gobierno «tiene claro cuál es el rumbo para tranquilizar la economía» y sostuvo que decidió negociar primero con los acreedores privados para «evitar un default» y, luego, avanzar hacia un acuerdo con el Fondo Monetario Internacional (FMI) y el Club de París.
«El programa con el Fondo tiene que ser una construcción colectiva y contar con el involucramiento de toda la sociedad en el proceso», dada la importancia de la negociación y su extensión en el tiempo, enfatizó el ministro.
Guzmán, en una exposición que se extendió por espacio de 40 minutos, a los que luego se sumaron quince minutos más para responder preguntas, afirmó que la recuperación económica es una «tarea colectiva» en la que, a diferencia de la gestión Cambiemos, que llevó una política de «reducción de impuestos, de achicamiento del Estado y una reforma económica que debilitaron al Estado y al sector privado», la actual gestión busca sentar las bases para un desarrollo sostenible que permita generar trabajo y valor agregado en todo el país.
«Sin industria no hay futuro», afirmó el ministro, al destacar que el sector es «fundamental» para la recuperación económica y que, para ello, se está trabajando sobre «la estabilidad macroeconómica, reglas de juego que den previsibilidad y que el Estado tenga un rol desde la política productiva que genere condiciones virtuosas para un crecimiento de la oferta en general».
«Queremos que los empresarios inviertan pero estas cosas no se resuelven en un año y medio. El proceso de diálogo y la articulación con cada representante del sector privado importa», sostuvo el ministro.
Durante la disertación, de la que participaron en forma presencial alrededor de 30 dirigentes de las principales cámaras y entidades del sector productivo del país, Guzmán repasó el trabajo del Gobierno de los primeros 18 meses de gestión y, en materia de precios, destacó que «están las condiciones dadas para que la inflación vaya reduciéndose».
«Había dicho que marzo iba a ser el mes más alto y eso ocurrió. Abril fue más bajo y en mayo va a ser más bajo que en abril. Hay que continuar porque estamos en niveles por encima que lo que consideramos que macroeconómicamente es factible», dijo Guzmán.
También recordó el abordaje «multicausal» de la inflación y dijo que «atacarla solo con políticas monetarias no va a ningún lado», ya que «hay que resolver problemas estructurales» y que requiere «un enfoque integral y un trabajo de colectivo de coordinación».
Aun así, aseguró que “la sostenibilidad fiscal es una condición necesaria para el desarrollo económico» y que el nivel de gasto público debe coordinarse entre «la necesidad de que el Estado reactive la economía y por el otro ir reduciendo el déficit fiscal”.
«Hay problemas para definir anclas y expectativas, por eso es fundamental la coordinación entre todos los actores de la macroeconomía ya que las expectativas y la formación de precios es una tarea colectiva», afirmó el ministro.
El encuentro se llevó a cabo en los jardines del hotel Four Seassons, en pleno centro porteño. Los empresarios se sentaron de a cuatro en mesas que estaban distribuidas con el distanciamiento suficiente en el marco de las medidas sanitarias de prevención por el Covid-19.
La mayoría de ellos, en medio de la fría tarde, también optó por aceptar mantas provistas por el hotel para darse algo de calor y enfrentar de esta forma la baja temperatura.
Desde el punto de vista de la consolidación del crecimiento, Guzmán dijo que «una premisa fundamental para la idea de tranquilizar la economía que las exportaciones crezcan de manera sostenida», así como el crecimiento del salario real, y que comparte con el sector empresario el objetivo de alcanzar «certidumbre, confianza y concertación».
Para ello dijo que se está trabajando en dar «pasos importantes para tener una política tributaria alineada con el fortalecimiento fiscal, con progresividad y con incentivos adecuados para la producción e inversión y más armoniosa desde el punto de vista federal».
«Teníamos una estructura tributaria producto de múltiples crisis económicas. La política tributaria tiene un recorrido por hacer. Si la idea es un país de impuestos bajos y gasto bajo, esa no es nuestra idea. El Estado tiene un rol en la estabilidad macro y en generar condiciones propicias para promover la actividad privada», afirmó el ministro.
Por último, adelantó que el próximo 15 de septiembre se presentará al Congreso el proyecto de Presupuesto 2022, en el cual se siga «el sendero para que el Estado tenga el rol de contribuir a apuntalar la recuperación económica y reducir el déficit fiscal».