El Gobierno nacional ratificó la continuidad de las inversiones para la potenciación de la industria aeroespacial y satelital, dónde como parte de la economía del conocimiento ya se destinaron más de $400 millones en los últimos cuatro meses.
«El presidente Alberto Fernández me pidió expresamente que les transmita que el Gobierno nacional va a seguir adelante con sus planes, proyectos e inversiones que estaban previstos dentro del Presupuesto que lamentablemente no se votó en el Parlamento producto de la irresponsabilidad por parte de la oposición», afirmó este mediodía el jefe de Gabinete, Juan Manzur, al encabezare la tercera mesa de trabajo sectorial, en el predio de Arsat, en la localidad bonaerense de Benávidez.
Como parte de esa mesa, Arsat ratificó la previsión del lanzamiento del satélite geoestacionario SG1 en octubre del 2023, la extensión de la red federal de fibra óptica, la ampliación del data center de la compañía estatal y la puesta a punto de la red de Televisión digital, entre otros proyectos.
«Argentina hoy es de los pocos países en el mundo que pueden contar con esta tecnología; eso todos los argentinos tenemos que cuidar, y seguir invirtiendo para seguir adelante», dijo Manzur.
En la misma sintonía, el secretario de Industria, Economía del Conocimiento y Gestión Comercial Externa, Ariel Schale, subrayó que «el desarrollo muscular de la industria aeropespacial es fundamental para encarar con éxito los desafíos de la economía 4.0».
Schale dijo que «es central» el desarrollo de «la industria satelital, el manejo de datos, la infraestructura comunicacional. Sin eso Argentina no va a poder encarar con éxito una economía 4.0».
Su definición de esta economía 4.0 es «básicamente la posibilidad de conocer al instante la decisión de los consumidores y eso tiene un impacto tremendo en los canales de distribución, comercialización y fundamentalmente de producción; al saber lo que se vende se organiza todo el proceso productivo».
«Sin satélites, sin inteligencia, sin server, sin nube de la información eso no sería posible», enfatizó.
En la mesa de trabajo subrayó que «el sendero del desarrollo productivo y el fortalecimiento de esta cadena de valor es también construir todos los días soberanía nacional: abastecernos, generar todo aquello que necesitamos y reducir al máximo la dependencia de otros, es soberanía».
Al sector aeroindustrial y satelital, uno de los cuatro rubros principales con capacidad de generar exportaciones, el Gobierno le inyectó $315 millones a través de aportes no reembolsables, en 15 proyectos que se postularon para el programa Potenciar.
A la vez, otros $80 millones fueron a través del programa Soluciona, que otorgó asistencia financiera a 6 proyectos, precisaron desde el Ministerio de Desarrollo Productivo.
En la misma mesa de trabajo, el titular de Arsat, Pablo Tognetti, presentó los proyectos para el año en curso que incluyen la puesta a punto de la televisión digital argentina «que estará lista a fin de año», la extensión de la red federal de fibra óptica (Refefo), que incluye el acuerdo con la empresa Transener para el uso de tramos de su infraestructura que permitirán cerrar anillos de fibra óptica para securizar la red.
Por otra parte ratificó el cronograma previsto para el tercer satélite geoestacionario, el SaG1, para dar servicios de conectividad a zonas rural «en un equivalente a 200.00 hogares» dentro del territorio argentino y 80.000 hogares en los países limítrofes».
La previsión es que tras superar las revisiones técnicas para este año, los ensayos y pruebas se realizarán entre abril y septiembre del 2023 y el lanzamiento está previsto para octubre del año próximo.
También en el encuentro, la directora del Banco de Inversión y Comercio Exterior (BICE), Kelly Olmos, anunció la disponibilidad de una línea para que las empresas que fabrican en el país bienes de telecomunicaciones e informática pueda «vender al exterior financiado» con una tasa «competitiva» de entre 2 y 3% en dólares.
Argentina cuenta con 300 pymes aeronáuticas, 130 pymes espaciales y 134 talleres aeronáuticos de reparación.
En este marco, el entramado productivo comprende más de 3.400 empleos formales, con salarios un 40% mayores del promedio industrial, y con una elevada demanda de personal especializado.
La industria satelital y aeroespacial argentina forma parte del grupo de países y regiones que desarrollan sus propios satélites de telecomunicaciones, entre los que están China, Estados Unidos, India, Israel, Japón, Rusia y la Unión Europea.