El Ejecutivo local junto a la comunidad educativa de la Primaria Nº26, ubicada en el barrio El Rocío, desplegaron un operativo de inmunización tanto del calendario nacional como del Plan Público, Gratuito y Optativo contra la Covid-19 con la conmemoración por un nuevo aniversario desde la creación de la Organización Mundial de la Salud como contexto.
En representación del mandatario comunal, Andrés Watson, el titular en la cartera sanitaria -Rubén Trepichio- destacó la importancia de una iniciativa que, “por expreso pedido del Intendente, realizamos con el fin de llegar a todo el distrito con la vacunación itinerante bajo la premisa de acercar el sistema de sanidad a toda la ciudadanía”.
El funcionario valoró la instancia de inoculación que, “con porcentajes de cobertura superior al 90%, hizo posible una disminución en los contagios de SARS-CoV-2 y una merma considerable en la circulación viral”. “La prevención como medida de acción fue clave”, agregó.
La secretaria del establecimiento -Ana Laura Tridone- remarcó: “La posibilidad de aproximar las vacunas a la sociedad fue maravilloso y eficaz. Las personas no tuvieron que dirigirse a lugares más lejanos”.
Posteriormente, enumeró los mecanismos para materializar la jornada. “El primer paso fue anunciar la campaña a toda la comunidad. Los auxiliares colaboraron con la configuración de los espacios donde atender a las familias de manera ordenada y sin perjudicar el funcionamiento habitual de la escuela para transcurrirla con normalidad. Por suerte, salió bien. Todos muy conformes”, manifestó.
Desde Las Margaritas, llegó Noelia Palacio con su niño Dante. Antes de ingresar al salón de 5toD, pasaron por la posta. “Con el vacunatorio cerca, no dudé en traerlo. Facilitó el proceso. En nuestro caso, fue recibir la tercera anti-Coronavirus y completar las faltantes del Calendario para estar al día en el cronograma. El Estado estuvo presente en todo momento durante la pandemia”, describió.
María Videla, de Zeballos, asistió para la colocación de la segunda dosis a su hija Rocío que cursaba segundo grado. “Poder inocularla en la institución escolar me pareció una excelente opción. No perdimos tiempo y aprovechamos la oportunidad porque a veces resultaba complicado llegar a los sitios donde asignaban los turnos. Estos operativos fueron una excelente idea”, afirmó.