El presidente Alberto Fernández recorrió ayer la refinería de la empresa Raízen ubicada en la localidad bonaerense de Dock Sud, donde además participó de la inauguración de una planta de propelentes que demandó una inversión de 8 millones de dólares, que son parte de un plan de inversiones por 715 millones que esa empresa desembolsará en el país hasta 2023.
La actividad sirvió también para que el jefe del Estado encabezara una reunión de trabajo en la que las autoridades le detallaron el avance del plan que están desarrollando en Argentina.
«Agradezco y valoro la confianza en el país. Tenemos que seguir trabajando juntos», dijo el mandatario, que asistió al lugar acompañado por el ministro de Desarrollo Productivo, Matías Kulfas; el secretario de Energía, Darío Martínez, y por el embajador de Argentina en Brasil, Daniel Scioli.
El Jefe de Estado invitó a los miembros de la compañía a «tener un diálogo franco» y aseguró que el Gobierno nacional está enfocado en asistirlos y «ayudarlos».
La planta que quedó inaugurada ayer en Avellaneda es una de las primeras que se realizan dentro del marco del plan de inversiones por 715 millones de dólares para el período 2020/23, que fue anunciado oportunamente cuando el presidente Fernández visitó la empresa el 13 de octubre pasado.
«Lo que estamos viendo acá es una inversión de más de 700 millones de dólares a desarrollarse en los próximos tres años. Y eso es muy importante porque es el trabajo de todos ustedes y el trabajo de muchos otros, que serán necesarios para generar más producción», valoró entonces el presidente Fernández según consigna un comunicado de prensa.
Para el desarrollo de esas dependencias los titulares de Raízen contrataron más de 10 pymes locales que dieron trabajo a una dotación de alrededor de 100 empleados durante aproximadamente seis meses.
Los empresarios explicaron que el nuevo edificio requirió una inversión de ocho millones de dólares para producir propelente, que es un gas formado por 80 por ciento butano y 20 ciento propano, de uso cosmético: «Usted nos pidió paciencia el año pasado y hoy se está viendo la reconstrucción argentina», indicaron.
Además. los ejecutivos de la firma destacaron que en producción y comercialización están «10 por ciento arriba» respecto de marzo de 2019.
La producción inicial de la unidad, «de 14.000 toneladas por año, será destinada al mercado local y existen grandes oportunidades de exportar una parte relevante al mercado de Brasil», según se informó oficialmente.
Dentro del plan de inversiones a tres años que prevé la compañía -según los ejecutivos le explicaron a Fernández- también hubo avances en proyectos por 71 millones de dólares que incluyen, junto a las instalaciones inauguradas, la construcción de cuatro nuevas plantas de hidrotratamiento de naftas, de hidrotratamiento de gasoil, de producción de hidrógeno y de tratamiento de aguas.
Además, evolucionan los proyectos de la nueva columna de destilación de última generación, y la incorporación de tecnología digital en procesos y nuevos equipamientos.
Por otro lado, los empresarios puntualizaron que entre 2020, y enero y febrero de 2021, junto con otros socios, inauguraron 40 estaciones de servicio Shell en distintos lugares del país, que generaron más de 400 nuevos empleos gracias a una inversión de más de 40 millones dólares.
Raízen es una empresa energética de origen brasileño, creada en 2010 por la asociación entre Shell y Cosan, líder en la fabricación de etanol de caña de azúcar en ese país y el mayor exportador individual de azúcar de caña en el mercado internacional que, en 2018, incorporó los activos de Shell en Argentina.
Durante la visita y la reunión, el Jefe de Estado dialogó con el titular del Consejo de Administración de Cosan Limited S.A, Comgas y Raízen, Rubens Ometto Silveira Mello; y los presidentes del Grupo Raízen, Ricardo Mussa, y de Raizen Argentina, Teófilo Lacroze.
También participó de la recorrida el intendente de Avellaneda, Alejo Chornobroff.