El gobernador bonaerense, Axel Kicillof, afirmó que la provincia de Buenos Aires «adhiere a las medidas que dictó el Presidente» Alberto Fernández para restringir la circulación y actividades para disminuir los contagios de coronavirus y criticó a la oposición de Juntos por el Cambio, a la que acusó de «hacer política y campaña electoral con la pandemia y tirarle nafta a la grieta».
«Estamos inmersos en una ola de coronavirus que sigue creciendo desenfrenadamente y no puede ser que el virus vaya por ascensor y las medidas por la escalera»», explicó en una conferencia de prensa en La Plata en la que respaldó las medidas adoptadas por el Presidente.
Kicillof lamentó no poder coordinar acciones con la Ciudad de Buenos Aires porque «el virus no reconoce un lado u otro de la General Paz», aunque sostuvo que «no me vengan con el verso del consenso porque parece que el único consenso es hacer lo que ellos quieren».
«Cuando buscábamos ese consenso con los jefes de Gabinete de Nación y la Ciudad, el Jefe de Gobierno firmó un comunicado donde Juntos por el Cambio estaba en contra de las restricciones. Están en campaña electoral y buscan hacerle daño al Gobierno», graficó.
El gobernador bonaerense respondió a los cuestionamientos que formuló Horacio Rodríguez Larreta al Presidente y consignó que «vimos una oposición furibunda y decidieron entrar en campaña electoral, les pido que la corten».
«¿Por qué no le van a decir al Reino Unido o a Uruguay que hicieron mal porque cerraron?. No paran de tirarle nafta a la grieta», sostuvo, y citó declaraciones del vicejefe de gobierno porteño, Diego Santilli, que en febrero advirtió que ante una segunda ola «habría que suspender las clases presenciales 10 o 15 días».
«No me vengan a correr que no nos interesa la educación. Llevamos dos años con paritarias cerradas y empezando desde el primer día de clases con el 50 % de maestros vacunados. No vamos a hacer una guerra con los que fundieron la educación pública», advirtió.
Explicó que la suspensión de las clases presenciales por 15 días en el AMBA no se dispuso solo «por lo que pasa adentro de las escuelas», sino que también «es la circulación, lo que pasa antes y después» de la actividad escolar.
«Se trata de bajar la circulación, y por 15 días, porque hay una proporcionalidad entre circulación y contagios», concluyó.