El Gobierno bonaerense ya colocó 16 señalizaciones en todo el territorio de la provincia de Buenos Aires para recordar aquellos lugares donde 16 mujeres fueron víctimas de femicidio, y así visibilizar el impacto socio cultural que provoca la violencia patriarcal en nuestras comunidades.

Se trata del Programa Mariposas de la Subsecretaría de Políticas Contra las Violencias por Razones de Género del ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual de la provincia de Buenos Aires, que busca la construcción de una memoria colectiva contra los arrasamientos producidos por las violencias por razones de género.

«Estas actividades son fundamentales y necesarias no solo para trabajar la memoria sino que también para desarrollar políticas de prevención», destacó la titular de la subsecretaría, Flavia Delmas.

Remarcó que «el Estado presente y la sociedad comprometida son necesarios para enfrentar las violencias de género con el objetivo de erradicarlas porque permean en todos los espacios en los que transitamos».

Según precisaron desde la Subsecretaría, el próximo jueves se realizará un acto homenaje con la colocación de la placa número 17 en memoria de Julieta Mena, asesinada por su novio, en octubre de 2015 en Ramos Mejía, a los 22 años, cuando estaba embarazada.

El fin de semana último, el Gobierno bonaerense señalizó el lugar donde fue asesinada Jovita Papponetti, a 17 años, en el Hospital Municipal «Eustoquio Díaz Vélez», de Rauch, donde trabajaba.