El gobernador de la provincia de Buenos Aires, Axel Kicillof, recibió ayer lunes en Casa de Gobierno a representantes de la Mesa Agropecuaria.
Estuvo acompañado de los ministros de Desarrollo Agrario, Javier Rodríguez; y de Economía, Pablo López; el presidente del Banco Provincia, Juan Cuattromo; y el director ejecutivo de ARBA, Cristian Girard.
“Desde el Gobierno de la provincia de Buenos Aires tenemos la vocación de apuntalar la producción rural y fomentar el arraigo en todos los municipios del interior”, expresó el mandatario provincial.
«Desde el primer día de nuestra gestión hemos acompañado al sector con todos los recursos que hemos tenido a disposición, comprendiendo la enorme diversidad y la existencia de problemas históricos y estructurales”, sumó.
Kicillof también remarcó que desde su gobernación “mejoramos 5.000 kilómetros de caminos rurales, creamos la Policía Rural e impulsamos la construcción de centros universitarios para promover que las y los jóvenes puedan realizar sus estudios superiores en sus localidades”.
«Como lo hemos hecho durante la sequía con los instrumentos del Banco Provincia, nuestra intención es continuar trabajando junto al sector para sostener la producción”, subrayó.
Durante la reunión se plantearon distintos ejes que giraron en torno a varias temáticas, por ejemplo cuestiones climáticas y macroeconómicas.
También destacaron la necesidad de que el Gobierno nacional convalide el decreto provincial de emergencia agropecuaria 2157/23, que abarca a 39 municipios bonaerenses, y convoque a la Comisión Nacional de Emergencia Agropecuaria para tratar el decreto 50/24, que incluye a otros 12 distritos, para que los productores de las zonas afectadas puedan acceder a los beneficios impositivos a nivel nacional y a los créditos especiales del Banco Nación.
En ese sentido, a principios de abril, el ministro Javier Rodríguez envió una carta al ministro de Economía de la Nación, Luis Caputo, y al secretario de Agricultura, Ganadería y Pesca, Fernando Vilella, en la que les solicitó una pronta resolución de la situación de “vulnerabilidad extrema” que hoy atraviesan más de 700 productores por la falta de respuesta del Estado nacional.
También se analizó la situación de la cosecha de maíz frente a la plaga de chicharrita, que ya provocó una fuerte baja en las proyecciones de producción de las entidades privadas. Asimismo, se abordó la apertura de la importación de alimentos, como el caso de la carne de cerdo y derivados, y la falta de planificación sanitaria por parte del SENASA.
Respecto al impuesto inmobiliario rural se estableció que ninguna partida estuvo por fuera de lo que establece la Ley Impositiva que votó la Legislatura Bonaerense en diciembre pasado, ni hubo errores en las liquidaciones.
“No somos un gobierno que esté en contra del sector agropecuario, todo lo contrario: vamos a acompañar a los productores con agenda abierta para sostener la actividad”, concluyó Kicillof.
En la reunión hubo autoridades de CARBAP, Federación Agraria Argentina, Sociedad Rural Argentina, CONINAGRO, FECOFE, FEBAPRI, Mujeres Rurales Argentinas, UATRE, FEDERADOS y representantes de Agricultura Familiar.