martes, noviembre 26, 2024

QUILMES

SOBREVIVIENTE QUE PASÓ POR EL POZO DE QUILMES Y EL DE BANFIELD DECLARÓ ANTE TOF 1 DE LA PLATA

Un hombre relató ante el Tribunal Oral Federal (TOF) 1 de La Plata, en un juicio que investiga a 16 represores por delitos de lesa humanidad cometidos en tres excentros clandestinos, el secuestro de una pareja uruguaya y el abandono de su beba de 8 meses durante un operativo policial.

Se trata de Fausto Bucchi, quien declaró ante el TOF 1 de La Plata, que desde octubre de 2020 juzga a 16 represores, entre ellos el exmédico policial Jorge Bergés, por delitos cometidos contra cerca de 500 víctimas cautivas en los excentros conocidos como Pozo de Banfield, Pozo de Quilmes y El Infierno, de Lanús.

Bucchi contó que el 21 de diciembre de 1977 llegaba al edificio en el que vivía, en Vicente López, y observó un despliegue de vehículos y hombres armados, vestidos de civil, en el hall.

El hombre quiso llamar a su esposa por el portero, pero antes que ésta pudiera atenderlo los hombres armados lo hicieron pasar al hall y lo retuvieron allí.

«En esa espera vi cuando se llevaban a una persona detenida y esposada, y por el ascensor se llevaban cosas también», explicó Bucchi.

Recordó que «un vecino del edificio que trabajaba en la Armada se hizo responsable de mi y pude entrar y dejé de tener contacto con lo que sucedía; pero al día siguiente, como era el vicepresidente del consorcio, el portero me llamó y me dijo que habían dejado a la criatura de la pareja del décimo piso que se habían llevado».

«Era Soledad Dosetti, de 8-9 meses, y el portero mencionó la imposibilidad de tenerla porque su mujer esperaba familia y se le complicaba tener a esa nena», detalló.

Contó, asimismo, que «fuimos al departamento, verificamos algunas cosas que había dejado esta gente» y «hallamos una cartas mantenidas con familiares de Uruguay y le mandamos cartas a las abuelas explicando la situación».

«Al tiempo vinieron las dos abuelas, pero para ese momento a la nena la habían llevado a la comisaría de la Mujer en San Martín. Yo era inspector de obras de la municipalidad de Vicente López y en ese momento en la municipalidad estaba el Comando de Operaciones Tácticas, tenía vinculación con algunos militares y me recomendaron que hiciera la denuncia de la desaparición y me dieron nota para ir a verificar a la comisarías de la mujer en San Martín y ahí pudimos ver a la nena», detalló el testigo.

Recordó, además, que las dos abuelas pudieron llevarse a la niña a Uruguay, en febrero de 1978.

«La nena tenía un arnés para mantener las piernitas abiertas porque tenía problemas de formación de las piernas y así la dejaron, con ese arnés y con el mismo la entregaron», precisó.

Soledad Dossetti es hija de Edmundo Sabino Dossetti Techeira y de Ileana Sara María García Ramos, ambos uruguayos, que estuvieron cautivos en Coti Martínez, el Pozo de Banfield y el Pozo de Quilmes, y aún permanecen desaparecidos

También declaró en esta audiencia Diego Barreda, sobreviviente que estuvo cautivo en Pozo de Banfield y el Pozo de Quilmes.

El hombre trabajó en Astillero Río Santiago, pero tras el golpe militar de marzo de 1976 fue despedido y entró a trabajar en la fábrica OFA de Villa Elisa; y fue secuestrado el 14 de julio de 1978.

«Me llevaron a la parilla en el Pozo de Quilmes, tuve varios desvanecimientos, me interrogaron de situaciones absurdas. Previo a esto me habían tomado la presión, no recuerdo a ningún otro sobreviviente que antes de torturarlo le hayan tomado la presión», apuntó.

El hombre también estuvo secuestrado en el Pozo de Banfield, donde a poco de llegar «se me empezó a caer la piel, una cosa pastosa que se desprende y cuando me di cuenta sentí una cosa terrible, no tenía noción de qué era» y dijo que «había otras celdas con gente y me dijeron que era habitual, que se me iba a caer toda la piel. Se me viene a la idea que los nazis hicieron tulipas, lámparas con piel. Duró una semana y me decían que era resultado de la picana eléctrica».

Barreda también declaró que compartió cautiverio con María Artigas de Moyano, quien dio a luz en cautiverio y luego de dos días apareció en su celda sin su hija y posteriormente fue desaparecida.

La hija de María es Victoria Moyano Artigas, recuperada en 1987.